A Bra'tac le mola... Match Point

Esta última semana después de exámenes ha sido bastante caótica. Entre Las fiestas en varios sitios a la vez, organizar viajes, despedidas y mudanzas, casi no he tenido tiempo para mi cariñoso y leal internet. Sin embargo, al llegar a casa a altas horas de la madrugada, una película (amén de las series que sigo) siempre era un buen precedente para echarse a dormir todavía más tarde. Una de esas películas ha sido Match Point.

Dirigida por Woody Allen, Match Point relata la historia de un hombre, Chris Wilton (Jonathan Rhys-Meyers), que se tiene que sacar las castañas del fuego para medrar en la vida. Comienza dando clases de tenis en un club muy selecto donde conoce a un alumno hijo primogénito de una familia de lo más acaudalada de Londres. Se hacen amigos y hacen planes juntos como ir a la Ópera. Allí, Chris, nuestro protagonista, conoce a la hermana de su alumno con la que acabará liándose. Sin embargo, la increíblemente atractiva Scarlett Johansson, novia del hermano de la novia, en esta película (os juro que es más fácil verlo que explicarlo), probocará en Chris pasiones insospechadas. Pero esto no es todo, el espíritu de Chris, movido por una idealización del azar, le llevará a meterse en un remolino de ambición y pasión del que será difícil, y, sobretodo, caro, salir.

Scarlet, una de esas atractivas actrices

Una historia en la que el azar juega un papel muy importante: como el mismo Chris diría, cuando juegas al tenis, si la pelota da justo en la parte superior de la red, hay una fracción de segundo en que no se sabe si la pelota va a seguir hacia adelante y vas a ganar o, por el contrario, va a ir hacia atrás y vas a perder. La gente tiene miedo al azar porque le desborda la idea de tener un descontrol tan grande en tantas cosas de la vida. Chris, sabe que es el azar, le reta y: ¿gana o pierde?

Pasa un buen rato bien acompañado viendo esta película. A mi me ha molado.