15 de octubre de 2008

Descubre a... J. R. R. Tolkien

John Ronald Reuel Tolkien (n. 3 de enero de 1892, Bloemfontein, Sudáfrica - † 2 de septiembre de 1973, Bournemouth, Reino Unido), CBE, más conocido en sus obras como J. R. R. Tolkien, fue un escritor británico, poeta, filólogo y profesor universitario, conocido por ser el autor de las obras clásicas de la alta fantasía El hobbit y El Señor de los Anillos.

De 1925 a 1945, Tolkien fue profesor de anglosajón en Rawlinson y Bosworth en la Universidad de Oxford y, de 1945 a 1959, profesor de lenguaje y literatura inglesa en Merton. Era amigo cercano del también escritor C.S. Lewis y ambos eran miembros de un informal grupo de debate literario conocido como los Inklings. Tolkien fue nombrado Comandante de la Orden del Imperio Británico por la reina Isabel II el 28 de marzo de 1972.

Después de su muerte, el tercer hijo de Tolkien, Christopher, publicó una serie de obras basadas en las amplias notas y manuscritos inéditos de su padre, entre ellos El Silmarillion y Los hijos de Húrin. Estos, junto con El hobbit y El Señor de los Anillos, forman un cuerpo conectado de cuentos, poemas, historias de ficción, idiomas inventados, y ensayos literarios sobre un mundo imaginado llamado Arda, y más extensamente sobre el continente conocido como la Tierra Media. Entre 1951 y 1955, Tolkien aplicó la palabra legendarium a la mayor parte de estos escritos.

Si bien escritores como William Morris, Robert E. Howard y E.R. Eddison precedieron a Tolkien en el género literario de fantasía con obras tan famosas e influyentes como Conan el bárbaro, el gran éxito de El hobbit y El Señor de los Anillos cuando se publicaron en Estados Unidos condujo directamente al resurgimiento popular del género. Esto ha causado que Tolkien sea identificado popularmente como el "padre" de la literatura moderna de fantasía, o más concretamente, de alta fantasía. Los trabajos de Tolkien han inspirado muchas otras obras de fantasía y han tenido un efecto duradero en todo el campo. En 2008, el periódico The Times le clasificó sexto en una lista de "Los 50 escritores británicos más grandes desde 1945".

Su pasión por los idiomas comenzó a los 8 ó 9 años de edad, cuando se deleitaba con el sonido del latín en los labios de su madre o se entretenía inventando sus propias lenguas (como el "animálico" - creación compartida con una prima suya-, el "Nevbosh" - nuevo disparate -, el "Naffarin" - basado en el español que aprendía con la ayuda del padre Francis); después descubriría el gótico, el galés y el finlandés (base de sus grandes creaciones: el Sindarin, la lengua de los Sindar, y, sobre todo, el Quenya, la lengua de los Noldor), alentado por sus profesores Kenneth Sisam, catedrático de instituto en Literatura Comparada y con quien competiría por la cátedra de Anglosajón en el Merton College de la Universidad de Oxford, y Robert Gilson, quienes descubrieron en él a un gran filólogo.

Su carrera académica y su producción literaria son inseparables de su amor hacia el lenguaje y la filología. Se especializó en la filología del griego durante la universidad y en 1915 se graduó con nórdico antiguo como materia especial. Trabajó para el Oxford English Dictionary desde 1918. En 1920, fue a Leeds como profesor de Inglés, donde reclamó crédito por aumentar el número de estudiantes en lingüística de cinco a veinte. Dio cursos sobre el verso heroico en inglés antiguo, historia del inglés, varios textos en inglés antiguo y medio, filología del inglés antiguo y medio, filología introductoria a germano, gótico, nórdico antiguo y galés medieval. Cuando en 1925, con treinta y tres años, Tolkien solicitó el profesorado en anglosajón de Rawlinson y Bosworth, presumió de que sus estudiantes de filología germana de Leeds habían formado un "Club Vikingo".

Privadamente, Tolkien estaba atraído por "cosas de significación racial y lingüística", y contempló nociones de un heredado gusto por el lenguaje, donde calificó a la "lengua nativa" como opuesta a la "lengua materna" en su conferencia English and Welsh, la cual es crucial para su entendimiento de la raza y el lenguaje. Consideraba el inglés medio de los midlands occidentales su "lengua nativa", y, como le escribió a Wystan Hugh Auden en 1955, "Soy de los midlands occidentales por sangre (y tomé el inglés medio de estos como una lengua conocida tan pronto como posé mis ojos sobre ellos)".

Paralelamente a su trabajo profesional como filólogo, y algunas veces eclipsándolo hasta el extremo de que su producción académica permaneciera bastante escasa, estaba su afecto por la construcción de lenguas artificiales. Las de mayor desarrollo eran el quenya y el sindarin. El lenguaje y la gramática para Tolkien fueron una cuestión de estética y eufonía, y el quenya en particular fue diseñado por consideraciones "fonoestéticas"; fue previsto como un "elfolatín", y estaba basado fonológicamente en el latín, con ingredientes del finés y el griego. Una notable adición vino a fines de 1954 con el númenóreano, una lengua de un "sabor ligeramente semítico", conectada con el mito tolkiano de la Atlántida, el cual por medio de The Notion Club Papers se ata directamente dentro de sus ideas sobre la heredabilidad del lenguaje, y a través de la "Segunda Edad del Sol" el mito de Eärendil fue asentado en el legendarium, de este modo proveyendo un enlace al "mundo real y primordial" del siglo XX de Tolkien con el pasado mitológico de la Tierra Media.

Tolkien considera a los lenguajes inseparables de la mitología asociada con ellos, y consecuentemente tomó tenue vista de las lenguas auxiliares: En 1930 un congreso de esperantistas escucharon esto de él, en su conferencia A Secret Vice, "La construcción de su lenguaje engendrará una mitología", pero en 1956 concluyó que el "volapük, esperanto, ido, novial, &c, &c, están muertos, más que otras lenguas ancestrales no utilizadas, debido a que sus autores nunca inventaron ninguna leyenda en esperanto."

La popularidad de los libros de Tolkien ha tenido un pequeño pero duradero efecto en el uso del lenguaje en la literatura fantástica en particular, e incluso en importantes diccionarios, que hoy en día comúnmente aceptan el restablecimiento tolkiano de las palabras dwarves (enanos) y elvish (élfico) (en contraposición a dwarfs y elfish), que no habían estado en uso desde mitad aproximadamente el siglo XIX. Otros términos que ha acuñado, tales como legendarium y eucatástrofe son mayormente usados en conexión con su trabajo.

Sin duda alguna. Un crack de su generación. Un artista de renombre que supo crear un mundo aparte de la nada. Esto si que es arte.

3 comentarios:

JiMoOo dijo...

oooh! que bonito el cuento de earendil!! otro dia lo cuento, si es q hay tantos que no se sabe por donde empezar!!

que tio mas ingenioso, no solo inventa un idioma, si no que dialectos en funcion de las razas de los elfos: los sindar, elfos de la tierra media, y los Noldor, altos elfos de valinor

bueno, me a costantao tanto escribir la entrada de los hijos de Hurin que al final me ha quedao debajo de la tuya jajjaj!

Amenophis dijo...

Qué suerte tenemos de que hayas decidido escribir, Tolkien

Nancy Callahan dijo...

buff, sí que no paraba en ningún momento :-S

A eso se le llama creatividad, ya les gustaría a más de uno crear tantas historias...

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...